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Organizaciones agrarias y de cooperativas confían en que lleguen cuanto antes las órdenes de compra de Italia para que se recuperen las exportaciones del granel español, aunque las ventas exteriores de formatos envasados van bien en los principales destinos y también progresa el mercado interior. El responsable técnico de aceite de Cooperativas Agro-alimentarias, Javier Lara, valora como “francamente positivo” para el sector que el mercado interior haya mejorado las ventas con el nivel de precios actuales y confía en que la exportación cambie de tendencia y retome la senda del crecimiento próximamente. Gracias a unas salidas globales de 108.000 toneladas en lo que va de campaña comercial (desde octubre de 2015 al 31 de marzo de 2016) -con datos todavía provisionales- las ventas acumuladas rondan las 648.900 toneladas, frente a las 707.200 t que se obtuvieron en el mismo período del ejercicio anterior, detalla Lara.

   Datos que han analizado esta semana, en concreto, en la reunión de la mesa sectorial del aceite que de ayer, en la que participan representantes del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) y su organismo autónomo Aica, y miembros de las organizaciones agrarias, de cooperativas y envasadores.

    A pesar de que el mercado interior repuntó -pasa de 250.000 a 279.400 toneladas-, las exportaciones han descendido y rondan desde octubre hasta marzo las 369.500 toneladas, lejos de las 456.700 toneladas que se obtuvieron en el mismo período 2014-2015, añade. Mientras tanto, la producción de esta campaña, contabilizada hasta esa fecha, se sitúa en 1.389.300 toneladas, según el sector.

Asaja espera que las compras italianas reactiven una exportación “rezagada”

    El responsable del sector técnico de aceite de oliva de Asaja, José Ramón Díaz, también ha explicado a Efeagro que la exportación en lo que va de campaña “va rezagada” y “debería mejorar tan pronto como lleguen los italianos a comprar al mercado español”.

    Díaz apunta que es habitual que los industriales italianos “barran” otros mercados productores -como Grecia y Túnez- y más tarde recurran a España, pues realizan sus operaciones en un función de la evolución de los precios de la materia prima de unos y otros.

    “La previsión es que aumenten las ventas exteriores”, aunque en qué momento ocurrirá esto dependerá de la situación económica, acuerdos comerciales, precios y otras variables -destaca Díaz-, tras comentar que se están vendiendo al exterior sobre todo los formatos envasados y no tanto los graneles, mientras que el mercado interior “está aguantando bastante bien” y recoge subidas.

UPA ve un mazo “positivo” pero mira al cielo pensando en la próxima campaña

    El responsable técnico de aceite de oliva de UPA, David Erice, valora que el mes de marzo ha sido “bastante positivo” y anticipa que el nivel de comercialización irá creciendo estos meses.

   “Hemos constatado buenos datos en el mercado interior, superiores a los del año pasado, y tenemos margen de mejora para la exportación -ésta ha caído en lo que llevamos de campaña- en la medida en la que los compradores se vayan quedando sin disponibilidades”.

    Erice valora que las lluvias de primavera han mejorado la situación en el campo pero las precipitaciones son aún menores respecto a las medias de un año normal, por lo que habrá que esperar a las próximas semanas para ver cómo se manifiestan los olivos -apenas ha llegado la floración- y, así, mayo y junio serán cruciales para la evolución del cuajado y la próxima recolección.

COAG reconoce la satisfacción del sector con los precios

    El secretario general de COAG-Jaén, Juan Luis Ávila destacaba recientemente a Efeagro que los oleicultores están satisfechos con el nivel de precios en origen actuales, porque permiten salvar los costes de producción en un cultivo del que dependen 200.000 familias que viven del olivar sólo en la comunidad autónoma de Andalucía. La evolución durante el último año ha sido positiva para las cotizaciones, según apostilla Ávila.

    Para el secretario general, las disponibilidades sirven para cubrir la demanda y poco más, y no es probable que la campaña próxima pueda aportar más allá de una cosecha “media”, aunque la climatología de los próximos meses tendrá la llave en el olivar.